Teorías de una tierra joven, del día/edad y de la Brecha

 

“En el principio creó Dios los cielos y la tierra”.

Génesis 1:1

 

INTRODUCCIÓN

                   La última vez estudiamos el tema que titulamos: La Tierra: ¿Millones de años de formación?, donde consideramos la posición de las eras geológicas que afirman que la tierra es consecuencia de la formación geológica de millones y millones de años, esto aunado al registro fósil que a través de las pruebas de carbono 14 algunos opinarían que también confirman dicha postura. Sin embargo, ya estudiamos cómo dichas pruebas no son 100% exactas y las condiciones atmosféricas de la tierra antes del diluvio producían bajas concentraciones de carbono 14 lo cual seria la explicación del por qué dichos fósiles poseen niveles de carbono 14 tan bajos y no creer que estos poseen millones de años. Ahora, en la actualidad podemos encontrar algunos intentos de armonizar el relato bíblico de la creación con la postura de las eras geológicas las cuales queremos considerar y evaluar a la luz de la palabra de Dios y la ayuda de su Espíritu Santo.

 

Teorías de una tierra joven, del día/edad y de la Brecha

 

INTENTOS DE ARMONIZAR LA BIBLIA CON LAS ERAS GEOLÓGICAS

 

                   La Biblia es clara al enseñarnos que este mundo en el que vivimos es consecuencia de la creación de Dios: “En el principio creó Dios los cielos y la tierra”, (Génesis 1:1). El principio de todo es el inicio de este mundo, de los cielos y la tierra, antes que existiese el tiempo, en la eternidad, Dios decidió crear de la nada los cielos y la tierra: “Por la fe entendemos haber sido constituido el universo por la palabra de Dios, de modo que lo que se ve fue hecho de lo que no se veía”, (Hebreos 11:3). De allí, entendemos que en 6 días de 24 horas cada uno, Dios creo todo lo que hoy habita en esta tierra y al séptimo Dios ceso su obra porque vio que todo era perfecto, no había más que agregarle o quitarle: “Fueron, pues, acabados los cielos y la tierra, y todo el ejército de ellos. Y acabó Dios en el día séptimo la obra que hizo; y reposó el día séptimo de toda la obra que hizo”, (Génesis 2:1-2). Esta ha sido la creencia tradicional y conservadora de la iglesia cristiana por muchos años, sin embargo, con el surgimiento de la teoría del big bang que explica que el universo proviene de una gran explosión cósmica, o la teoría de la evolución y la posición de las eras geológicas que afirman que la tierra es consecuencia de millones de años de formación geológica y la vida se ha dado paso a través de un proceso de evolución, muchos han abandonado la creencia en la doctrina de la creación y otros tantos han buscado una manera de armonizar dichas posiciones con el relato bíblico. En esta oportunidad vamos a considerar estas posiciones.

 

            Una posición deísta.

 

            El deísmo es una cosmovisión que cree en Dios, pero no a través de la revelación de las Escrituras o cualquier otra religión, sino, se apoya en el uso de la razón, la observación de las maravillas de este universo que conllevan a la conclusión de un ser supremo que creo todo lo que hoy existe. Generalmente los deístas creen en la existencia de un ser divino el cual creo el mundo, pero luego de esto lo abandono, dejándolo regido por las leyes científicas que hoy lo sostienen y hacen posible la convivencia de todos los seres vivos. Los deístas creen que Dios ya no interviene en los asuntos de los hombres ni en los sucesos que ocurren en este universo. Sin embargo, nosotros negamos estas afirmaciones, porque Dios no solo ha creado este universo, la tierra y todo lo demás que existe, sino, también gobierna en todos los asuntos de este mundo: “Él es quien cubre de nubes los cielos, el que prepara la lluvia para la tierra, el que hace a los montes producir hierba. Él da a la bestia su mantenimiento, y a los hijos de los cuervos que claman”, (Salmo 147:8-9). El Señor tiene su gobierno sobre la vida de todos los seres: “Todos los habitantes de la tierra son considerados como nada; y él hace según su voluntad en el ejército del cielo, y en los habitantes de la tierra, y no hay quien detenga su mano, y le diga: ¿Qué haces?”, (Daniel 4:35).

 

            Teoría día/edad: Una interpretación alegórica de la palabra día en Génesis 1.

 

“Mas, oh amados, no ignoréis esto: que para con el Señor un día es como mil años, y mil años como un día”.

2 Pedro 3:8

                  Otros han intentado armonizar todas estas teorías y posturas dándoles al relato de Génesis 1 una interpretación alegórica. Estos afirman que los días de creación de Génesis 1 no se deben entender como días de 24 horas, sino de forma alegórica, es decir, le da un significado figurado a la interpretación de la palabra, “días”, afirmando que los “días” de Génesis 1 corresponden a periodos de millones de años que encajan con las eras geológicas. Los que afirman esto se basan en las palabras de 2 Pedro 3:8: Mas, oh amados, no ignoréis esto: que para con el Señor un día es como mil años, y mil años como un día. Con esto encontramos dos problemas. Primero, estaría mal tomar las palabras de Pedro y forzarlas para ser usadas y dar una interpretación alegórica en Génesis, más bien intenta explicar que en la eternidad, el concepto del tiempo no existe, ya que si consideramos el contexto en el cual esta diciendo estas palabras, encontramos que está hablando de que el Señor no ha atrasado su promesa de su segunda venida, ya que aunque para el hombre ya pasaron muchos años desde que lo prometió, en la eternidad Dios no tiene el problema del tiempo y no se ve presionado por ello, de allí que el apóstol diga que para Dios un día es como 1000 años y viceversa, porque el tiempo no lo limita ni le afecta como al ser humano, al contrario, el Señor sabe el momento en el que habrá de regresar tal y como lo prometió. Lo segundo, el estilo literario que predomina en los capítulos del libro de Génesis es narrativo histórico, por tanto, no hay nada que nos sugiera que se debe utilizar el método de interpretación alegórico para darle un significado diferente al literal. Aunque en la Biblia encontramos metáforas, parábolas, eufemismos, ironías, adivinanza, fabulas, prosopopeyas, símil, hipérboles, lenguaje apocalíptico, dramatizaciones y otras figuras literarias que requieren un método de interpretación acorde al lenguaje que se usa, nada nos dice que los primeros capítulos del libro de Génesis se le pueda dar un significado diferente al literal. Además de todo esto, cada día de la semana de la creación termina afirmando que todo lo que Dios creaba en ese momento era perfecto, es decir, no había más que agregarle o que tuviera que evolucionar, porque era perfecto en gran manera: “Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera…”, (Génesis 1:31).

 

            ¿Teoría de la Brecha?

 

“En el principio creó Dios los cielos y la tierra. Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas. Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz”.

Genesis 1:1-3

 

Se ha conocido como la teoría a de la brecha a la posición que afirma que entre Génesis 1:1 y Génesis 1:2 existe una brecha de tiempo que duro millones de años entre la creación perfecta y los evento de reordenamiento de la tierra narrados a partir de Génesis 1:3, donde son creados los seres vivo que hoy existen incluyendo el hombre. Estos afirman que en el principio Dios creó los cielos y la tierra en Génesis 1:1, y todo era perfecto, pero esta creación era muy diferente a la actual, ubicando aquí los dinosaurios y otras especies que se han encontrado fosilizados, también afirman que existían seres humanos sin alma, a los cuales llaman seres preadámicos, Satanás era el gobernador de esta tierra y fue puesto en un Edén compuesto de minerales (Ezequiel 28:12-18), posteriormente se rebeló deseando llegar a ser como Dios (Isaías 14:12-14) y en su rebelión arrastro a la tercera parte de los ángeles y a los hombres preadámicos, por lo que Dios trajo un diluvio universal (este es un diluvio diferente al de los tiempos de Noé narrado en Génesis 6-8) el cual destruyo la tierra y provoco la muerte de todos los animales  prehistóricos. Es aquí donde los hombres preadámicos se convirtieron en demonios y los que creen en esto hacen diferencia entre un demonio que puede poseer a un ser humano y un ángel caído.

 

Esta teoría surgió en 1814 con Thomas Chalmer, quien busco una forma de armonizar la postura de las eras geológicas con el relato bíblico y con el tiempo fue abrazada entre el mundo cristiano incluyendo algunos teólogos de renombre como C. I. Scofield y J. Vernon McGee. La posición principal de los defensores de esta teoría es la interpretación que se le da a Génesis 1:2: Y la tierra estaba desordenada y vacía. ¿Por qué estaba desordenada y vacía la tierra si anteriormente en Génesis 1:1 dice que Dios creo los cielos y la tierra? ¿Dios creo las cosas imperfectas y por eso las ordeno posteriormente? Bueno, estas personas entiendo que la clave para responder a estas preguntas es entender el significado etimológico de las palabras hebreas que se traducen en Génesis 1:2 como, “desordenada” y “vacía”. La palabra desordenada se traduce del hebreo Tohu (תּיהוּ), y se puede traducir como Inhabitable, desierta o asolada. Luego, la palabra vacía se traduce del hebreo Bohu (תּיהוּ), la cual se puede traducir como Confusión o caótico. En este sentido, después de Génesis 1:1 donde Dios creo los cielos y la tierra, encontramos en Génesis 1:2 a la tierra desolada, totalmente deshabitada y en caos. ¿Por qué? Bueno, para responder a esa pregunta entienden lo que paso en otro pasaje de la Biblia donde se vuelven a utilizar las mismas palabras hebreas: “Miré a la tierra, y he aquí que estaba asolada (Tohu) y vacía (Bohu); y a los cielos, y no había en ellos luz”, (Jeremías 4:23). Ahora, ¿en Jeremías qué provoco que la cuidad de Jerusalén quedase desolada y vacía, en gran caos? La respuesta es: La guerra, la invasión de Babilonia. Luego, ¿en Génesis 1:2 qué provoco que la tierra quedara asolada y en gran caos? Aquí responden algunos: La rebelión de Satanás. Según esta posición Satanás fue creado y dejado en esta primera tierra como una especie de gobernador y era el querubín protector de Dios: “Vino a mí palabra de Jehová, diciendo: Hijo de hombre, levanta endechas sobre el rey de Tiro, y dile: Así ha dicho Jehová el Señor: Tú eras el sello de la perfección, lleno de sabiduría, y acabado de hermosura. En Edén, en el huerto de Dios estuviste; de toda piedra preciosa era tu vestidura; de cornerina, topacio, jaspe, crisólito, berilo y ónice; de zafiro, carbunclo, esmeralda y oro; los primores de tus tamboriles y flautas estuvieron preparados para ti en el día de tu creación. Tú, querubín grande, protector, yo te puse en el santo monte de Dios, allí estuviste; en medio de las piedras de fuego te paseabas. Perfecto eras en todos tus caminos desde el día que fuiste creado, hasta que se halló en ti maldad”, (Ezequiel 28:11-15). Si nos damos cuenta, este querubín hermoso fue puesto en un Edén, un huerto lleno de toda piedra preciosa y minerales, rodeado de piedras de fuego, lo cual probablemente hace referencias a volcanes, lo cual hace opinar a algunos que corresponde a una tierra prehistórica. Luego, este querubín se rebela y así entra el pecado a este mundo: “¡Cómo caíste del cielo, oh Lucero, hijo de la mañana! Cortado fuiste por tierra, tú que debilitabas a las naciones. Tú que decías en tu corazón: Subiré al cielo; en lo alto, junto a las estrellas de Dios, levantaré mi trono, y en el monte del testimonio me sentaré, a los lados del norte; sobre las alturas de las nubes subiré, y seré semejante al Altísimo. Mas tú derribado eres hasta el Seol, a los lados del abismo”, (Isaías 14:12-15). Los que creen en la teoría de la brecha afirman que estas naciones a las cuales Satanás debilitaba, eran naciones de hombres preadámicos y debido al pecado de Satanás el pecado entro a la tierra y consecuentemente Dios envió un diluvio universal que trajo el juicio sobre toda esta creación y la tierra fue destruida y desolada en este proceso. El problema con esta última interpretación es que no hay mayor base bíblica para demostrar dichas afirmaciones, luego, las naciones que se mencionan en Isaías 14:12-15 no necesariamente pueden referirse a naciones de una raza preadámicos ya que dicho pasaje es una profecía que en primer lugar es dirigido al rey de Babilonia y de manera indirecta a Satanás, así como Ezequiel 28:11-15 esta dirigido primeramente al rey de Tiro e indirectamente se dirige también a Satanás. Así que, hay palabras y contextos que corresponden a los reyes de Babilonia y Tiro, otras están dirigidas a Satanás y otras a ambos. Además, el pecado no entro al mundo por la rebelión de Satanás, tal y como esta teoría afirma. Aunque no negamos que Satanás peco y por eso fue arrojado del cielo por Dios, el pecado entro a este mundo y a la humanidad en general por la caída del hombre: “Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron”, (Romanos 5:12). Por tanto, la mayoría de las afirmaciones que la teoría de la brecha presenta no tienen un fundamento bíblico que pueda confirmarla, aun así algunos teólogos o maestros cristianos creen en la teoría de la brecha o en partes de ella.

 

            Teoría de la tierra joven.

 

Prácticamente esta posición es la que afirma que Dios creo los cielos y la tierra, así como todo lo que habita en ella en 6 días y al séptimo descanso. En este sentido la tierra tiene alrededor de unos seis o siete mil años de antigüedad y no millones de años como algunos geólogos afirman. El diluvio universal de Génesis 6-8 seria la causa de un cataclismo universal que transformo geológica y climáticamente la tierra, lo cual ahorra los geólogos y arqueólogos afirman que son evidencias de las transformaciones geológicas de la tierra y las diferentes eras que ha experimentado. No obstante, en el estudio anterior titulado: La Tierra: ¿Millones de años de formación?, hemos presentado los argumentos que no ayudan a entender y creer que el relato de Génesis 1-2 es digno de confianza.