“¿Quién
contará el polvo de Jacob, o el número de la cuarta parte de Israel? Muera yo
la muerte de los rectos, y mi postrimería sea como la suya”.
Números 23:10
INTRODUCCIÓN
En cierta ocasión una anciana le
dijo a su pastor que cuando muriera la enteraran teniendo en su mano derecha
una Biblia y en la izquierda un tenedor.
El pastor pregunto por qué un tenedor. Ella respondió que cuando era
niña su padre después de cada cena le decía, hija guarda el tenedor porque lo mejor
está por venir. Así la gente preguntaría cuando la vieran muerta en su ataúd
con un tenedor por qué lo tenía. La respuesta debía ser: por hoy que ha muerto
a pasado a la presencia de Dios y lo mejor para ella está por venir. ¿Qué
representa para nosotros la muerte? Será para victoria nuestra, o será una
verdadera tragedia.
La muerte: ¿victoria o tragedia? |
I.
LA MUERTE SIN CRISTO.
“Porque
he aquí, los que se alejan de ti perecerán; tú destruirás a todo aquel que de
ti se aparta”.
Salmo 73:27
La muerte para los que viven en el
pecado acarrea únicamente juicio y tormento eterno. El salmista dice que
aquellos que viven lejos de Dios están destinados a perecer y ser destruidos. Para
aquellos que viven en pecado la muerte solo trae tragedia y este es un destino
que nadie puede evitar por mucho que el hombre busque la forma de evitarlo.
“Y de la
manera que está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después
de esto el juicio”.
Hebreos
9:27
Indiscutiblemente el juicio de Dios
les espera a todos aquellos que mueran sin Cristo en su corazón. Las Escrituras
nos enseñan ampliamente que los malos no heredaran la vida eterna y solo les
espera la condenación eterna.
“Aconteció
que murió el mendigo, y fue llevado por los ángeles al seno de Abraham; y murió
también el rico, y fue sepultado. Y en el Hades alzó sus ojos, estando en tormentos, y vio de lejos a
Abraham, y a Lázaro en su seno”.
Lucas
16:22-23
Sin embargo, veamos lo que significa
la muerte para los cristiano.
II.
LA MUERTE PARA LOS CRISTIANOS.
“Estimada es a los ojos
de Jehová La muerte de sus santos”.
Salmo 116:15
Para Dios la muerte de sus hijos es
preciosa y estimada y en la Biblia encontramos por qué para los cristianos esto
representa una victoria.
1.
La
muerte para el cristiano es el fin de todas sus penas y dolores.
“Y oí una
gran voz del cielo que decía: He aquí el tabernáculo de Dios con los hombres, y
él morará con ellos; y ellos serán su pueblo, y Dios mismo estará con ellos
como su Dios. Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá
muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas
pasaron”.
Apocalipsis 21:3-4
La primera razón por la cual la
muerte es una victoria para los cristianos es porque allí terminan todas sus
penas y sufrimiento. Dios hace una exhortación ha mantenernos firmes y pelear
hasta el final: El
que venciere heredará todas las cosas, y yo seré su Dios, y él será mi hijo.
2.
La
muerte para el cristiano es la culminación y recompensa de su vida piadosa.
“Porque
yo ya estoy para ser sacrificado, y el tiempo de mi partida está cercano. He
peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe. Por lo
demás, me está guardada la corona de justicia, la cual me dará el Señor, juez
justo, en aquel día; y no sólo a mí, sino también a todos los que aman su
venida”.
2 Timoteo 4:6-8
En estos versículos Pablo se alegra
al pensar que el día de su muerte estaba cercano ya que sabía que la corona de
justicia le estaba reservada. La Biblia nos enseña que Dios recompensara la
obra de cada uno según lo que haya hecho. Por ello encontramos que se nos dice
que heredaremos la Corona de Justicia
(2 Timoteo 4:8), la Corona Incorruptible (1 Corintios 9:24-25), La Corona
de Gozo (1 Tesalonicenses 2:19), La Corona Incorruptible de Gloria (1 Pedro 5:4) y La Corona de la Vida (Apocalipsis 2:10 y Santiago 1:12); aparte de
ello en los capítulos 2 y 3 de Apocalipsis Jesús exhorta a las iglesias a
permanecer fieles y recompensarlas por
ello. Por ejemplo a la Iglesia de Éfeso le dice: “Al que venciere, le daré a comer del árbol de
la vida”, (Apocalipsis 2:7). A Esmirna: “El que venciere, no sufrirá daño de la segunda
muerte”, (Apocalipsis 2:11), a Pérgamo: “Al que venciere, daré a comer del maná
escondido, y le daré una piedrecita blanca, y en la piedrecita escrito un
nombre nuevo, el cual ninguno conoce sino aquel que lo recibe”,
(Apocalipsis 2:17), a Tiatira: “Al que venciere y guardare mis obras hasta el fin, yo le
daré autoridad sobre las naciones”, (Apocalipsis 2:26); a Sardis: “El que venciere
será vestido de vestiduras blancas; y no borraré su nombre del libro de la
vida, y confesaré su nombre delante de mi Padre, y delante de sus ángeles”,
(Apocalipsis 3:5); a Filadelfia: “Al que venciere, yo lo haré columna en el templo de mi Dios,
y nunca más saldrá de allí; y escribiré sobre él el nombre de mi Dios, y el
nombre de la ciudad de mi Dios”, (Apocalipsis 3:12); y a Laodisea: “Al que venciere, le
daré que se siente conmigo en mi trono”, (Apocalipsis 3:21). También
encontramos las parábolas de las minas y los talentos en los evangelios que nos
hablan de recompensas para aquellos que se esforzaron en trabajar para el reino
de los cielos. En general, la muerte para el cristiano representa una gran
victoria porque recibirá su recompensa por todo lo que haya hecho para Dios.
3.
La
muerte para el cristiano le da la oportunidad de conocer cara a cara a Jesús.
“Y no
habrá más maldición; y el trono de Dios y del Cordero estará en ella, y sus
siervos le servirán, y verán su rostro, y su nombre estará en sus frentes”.
Apocalipsis 22:3-4
Una
de las promesas mas gloriosas que los cristianos tenemos es que un día veremos
cara a cara a nuestro Dios y Redentor, Jesucristo. En la Biblia se explica que
prácticamente no existe nadie que pueda ver a Dios y viva: “Dijo más: No podrás ver mi rostro; porque no
me verá hombre, y vivirá”, (Éxodo 33:20). También en el Nuevo
Testamento se repite esta verdad: “A Dios nadie le vio jamás; el unigénito Hijo, que está en el
seno del Padre, él le ha dado a conocer”, (Juan 1:18). Sin embargo,
en Apocalipsis encontramos la promesa de ver a Dios a través de la persona de
Jesús.
CONCLUSIÓN
La muerte para los cristianos
representa una victoria porque pone fin a sus penas y dolores, es la
culminación de su vida cristiana y la oportunidad de conocer a Dios. En cambio,
para el impío la muerte es una tragedia porque pasa a condenación eterna.
Muy edificante para los creyentes que andamos en la verdad, gracias hermano, me gusta compartir el evangelio , ustedes no tienen folletitos para repartir en la calle. Es primer que los veo por la gracia
ResponderBorrarde Dios y estos versiculos me sirven para los mismos hermanos en Cristo, pero no tienen claro que vamos
a pasar por tribulacion y muerte. Que puedo hacer para ayudarlos ya que otros falsos siguen con su rapto pretribulacionista. Les agradezco si me orientan, soy de Mexico
Muy edificante muchas gracias sigan adelante Dios los bendiga
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